3 MANERAS DE ENCONTRAR UN PROPÓSITO: ¿CUÁL ES EL SENTIDO DE TU VIDA?
Si le pides al mundo que te muestre el sentido de la vida, lo has entendido al revés. El mundo te está haciendo esa pregunta… y sólo hay tres lugares para encontrar la respuesta correcta.
¿Cuál es el sentido de la vida?
Hay pocas preguntas más humanas… y pocas más arrogantes de formular. Es un poco como ir a una entrevista de trabajo y exigir saber qué pueden hacer por ti, en lugar de exponer por qué eres perfecto para el puesto. El mundo hace las preguntas, y al mundo no le importa lo que esperas de él. Pero aquí está la buena noticia para los estoicos: el verdadero significado no viene de lo que el mundo te da, sino de cómo respondes a ello.
3 Caminos hacia el Propósito: Crear, Cuidar y Conquistar
Centrarte en lo que «mereces» del mundo no te ayudará a descubrir tu propósito. En cambio, el estoicismo enseña a dejar de hacer preguntas y a fijarse en las tareas que la vida te pone delante.
Hay tres maneras de hacerlo: CREANDO cosas a partir de los materiales que el mundo te da; CUIDANDO de las personas que el mundo pone en tu vida; y VENCIENDO el sufrimiento inevitable que el mundo te hace pasar.
- Crear cosas
No podemos elegir lo que el mundo nos da para trabajar, pero podemos elegir cómo lo utilizamos, le damos forma, lo organizamos y construimos con él. No hace falta ser el mejor en algo para encontrarle sentido y alegría. Nuestros antepasados se sentían tan satisfechos creando cosas con piedras como Leonardo da Vinci pintando la Mona Lisa. Encontrar sentido a la vida a través del trabajo, el arte, la escritura, la superación personal, las aficiones e incluso las tareas domésticas son formas de «crear». Cualquier reto que implique utilizar tu entorno, hacer cosas nuevas o mejorar algo es una oportunidad para encontrar un propósito, independientemente de si es glamuroso o no.
- Cuidar de los demás
Esta fuente de significado es la más sencilla de entender, porque está profundamente arraigada en la experiencia de ser humano. Toda persona tiene la oportunidad de encontrar un propósito en la vida cuidando de los demás, ya sea como amigo, profesor, padre, líder o incluso como simpatizante anónimo.
La alegría de cuidar de los demás no se limita a las relaciones directas con la gente. Este tipo de sentido también puede alcanzarse implicándose en causas y organizaciones benéficas, ayudando a grupos y organizaciones, y viviendo la vida de un modo que ayude a los demás cuando uno ya no esté.
- Vencer el sufrimiento inevitable
Lo importante primero: el estoicismo no enseña que el sufrimiento sea necesario para encontrar sentido a la vida. Si puedes evitar el sufrimiento, deberías hacerlo. Pero si nuestro sufrimiento es realmente inevitable, entonces es posible encontrar un significado revelador en cómo afrontamos el dolor, o cómo lo «conquistamos». Cuando el mundo nos plantea un reto difícil, podemos hacer que nuestra misión sea distinguirnos por afrontarlo con valentía.
Ten presente que vencer el sufrimiento inevitable no significa necesariamente que hagamos desaparecer el dolor. Podemos «conquistar» el sufrimiento, la discapacidad e incluso la muerte por la forma en que decidimos afrontarlos. El sufrimiento inevitable -ya sea por enfermedad, accidente, vejez o pérdida- nos visita a todos en algún momento. Cuando lo hace, es posible encontrar un propósito aceptando que es nuestra propia y única tarea afrontar el sufrimiento. Podemos definirnos a nosotros mismos y servir de ejemplo a los demás por nuestra forma de soportarlo.
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